lunes, 26 de octubre de 2015

TIPS PARA LLEVAR CON ÉXITO UN BUEN "TIEMPO DE ALABANZA Y ADORACIÓN"



1. para empezar con fuerza debes gritar: "QUIÉN VIVE?"...
2. si ves que vas perdiendo la atención de la gente o no se conectaron agrega un: "CUÁNTOS PUEDEN DAR UN GRITO DE JÚBILOOOO"
3. si el de júbilo no funciona recurre al: "GRITO DE GUERRA"
4. cada vez que vaya a iniciar una canción puedes preguntar: "¿CUÁNTOS SON RADICADLES?", "¿CUÁNTOS HAN VENIDO DELANTE DE SU TRONO?", "¿CUÁNTOS QUIEREN EXALTAR SU MAJESTAD?", "¿CUÁNTOS QUIEREN QUE MANDE SU LLUVIA?", etc. siempre que lleve el título o la primera frase de la canción que vas a cantar…
5. no olvides en las canciones lentas pedir: "CIERRA TUS OJOS AHÍ DONDE ESTÁS"... ahí donde estás, por si acaso se les ocurra cerrar los ojos en otro lado...
6. al final de una canción rápida puedes REPETIR EL CORO UNA Y OTRA VEZ DE FORMA MÁS LENTA, (a manera de "adoración" para usar términos comprensibles en el léxico eclesiástico más ortodoxo)... para luego de unos 10 minutos de repetición volverla a ACELERAR... eso nunca falla
7. cuando termines cada tema, o entre canciones, sobre todo en los temas letos puedes improvisar un "CÁNTICO NUEVO" como el MISMO QUE USAN TODOS... alargando ciertas sílabas con micro melodías e inflexiones a lo blues como: "TE ADORAAAAMOS SEÑOR", "ALABAAAAMOS TU NOMBRE",... la melodía no cambia nunca, lo único que cambia un poco y a veces son las frases que pueden ser sacadas de la misma canción: "HOY TE BUSCAAAAMOOOOOS", "QUEREMOS EXALTAAAR TU NOOOOOMBRE"... etc. es uno de los RECURSOS NUEVOS MÁS USADOS DESDE HACE AÑOS...
8. finalmente JAMÁS pero JAMÁS olvides que luego del aplauso de la gente tienes que pedir: "SI ESE APLAUSO ES PARA EL REY... APLÁUDELE MAS FUERTEEEE", mejor si es con una mezcla de "CÁNTICO NUEVO", así podrás decir que eres bien humilde y "los aplausos no son por tu buena interpretación", de tal manera tendrás éxito en tu vida ministerial...
usando estos tips llegarás lejos y todos te querrán! y seremos más felices...!
PD. tip #9 bonus track: RECUERDA PONER SIEMPRE UNA VOZ MEDIO GRUESA, HABLAR COMO SI TUVIERAS UNA PAPA EN LA BOCA, COMO PSEUDO-LOCUTOR DE RADIO...
PD2. estos tips funcionan desde los años 90's, garantizado!

Gavriell Arcos
-sGv-

miércoles, 21 de octubre de 2015

ATADO (cuento)




En aquella ocasión llegué a la iglesia. Era un domingo cotidiano como los que había vivido los últimos y primeros 18 años de mi vida.  Llevaba el mismo ánimo de los tres meses anteriores, es decir “desánimo”.   Mi estadía en la religión se había transformado en lo usual de todo asistente a los cultos dominicales, una fastidiosa pero necesaria costumbre.

Las canciones eran las de moda, con toda la tertulia pertinente para levantar el espíritu del momento.  Frases tan comunes y siempre efectivas evocaban la emoción del auditorio y procuraban la buena presencia de nuestro Dios, al menos eso creíamos.  A momentos intenté envolverme en los sentimientos de mis acompañantes pero poco logré, quería ser el cristiano de antaño que compartía todo el ritual y se llenaba de eso, pero la monotonía de mi vida era exactamente igual que la del lugar al que asistí cada fin de semana.  Apenas si pude cerrar los ojos un instante, aunque preferí mantenerlos abiertos para observar a Paula, quien de refilón también coqueteaba conmigo.

No quise dar mi ofrenda pues hace tiempo me sentía algo traicionado por la administración monetaria en los templos, así que preferí reservarme el derecho de dar ese dinero como ayuda a algún necesitado.  Muchos me argumentaban mi equivocación con palabras inentendibles como “alfolí”.  Entonces pasó el predicador, un hombre algo rechoncho y alto, siempre bien vestido con su terno y corbata.  No me cabe duda de que él, como las señoras que nos daban la bienvenida y los otros hombre de terno, desarrollaban las tareas (al menos la mayoría de veces) con sinceridad, y eso me hacía sentir aún más como “suela de zapato” por mi vaga actitud eclesial.

Pero no podía más.  El sermón trataba de un montón de normas y sacrificios que hizo aquel pueblo antiguo que desobedeció a Dios, a la par el pastor se refirió a los castigos que recibiría por mi actitud similar a la de esa nación.  Luego mencionó a dos o tres personajes históricos de la Biblia, y atacó en algo a la música que precisamente yo escuchaba.  Todos decían: “amén”, cada vez que él lo pedía.

Dije que no pude más, me quise mover y no pude.  De repente mis extremidades se entumecieron y mi voz fue apagada, abrí mi boca deseando gritar y no salía sonido alguno.  Comencé a desesperar aún más cuando noté que la gente a mi lado seguía al reverendo y no reparaba en mí, como si yo fuera totalmente invisible.  Fue peor cuando advertí que no distinguía nada de lo que hablaba el pastor, era como si en mis oídos se albergara un tumulto de ruido ensordecedor.  Miraba angustiado a mis padres y no me hacían caso, trataba de saltar de mi puesto y era inútil, quise llamar la atención del predicador pero fue imposible.

Me fijé que subieron los músicos y nuevamente la gente se puso de pie y empezó a cantar, yo seguí inmóvil, sin poder pronunciar palabra alguna y alejado del interés de los asistentes.  Me dije a mi mismo con toda seguridad: “Dios me está castigando porque soy un mal cristiano, no me gusta la iglesia, me aburre, no comparto sus ritos y apenas presto atención a los sermones… merezco ser condenado”.

Casi que me entregué voluntariamente a mi castigo cuando el ruido en mi oído cesó y oí una voz firme que me dijo: “tranquilo, no tengas miedo… que yo me siento igual”.  Volví mi rostro de un lado al otro para encontrar al que me había hablado, entonces lo alcancé a ver en un rincón del auditorio, era Él,… era Jesús.  Pero estaba atado a una silla de pies y manos, con una venda en la boca, intentando moverse y hablar en la iglesia,  pero lógicamente no podía…

Reaccioné, y entendí porqué me sentía así… entonces pude moverme y caminar hacia el rincón…

Gavriell Arcos
-sGv-

domingo, 18 de octubre de 2015

PENSANDO EN LA INMORTALIDAD DEL CANGREJO



Cuando andamos divagando, distraídos, no ponemos atención, reflexionamos en cosas quizás absurdas y damos vueltas en la mente, es que estamos “pensamos en la inmortalidad del cangrejo”.  En otras palabras, PERDEMOS EL TIEMPO.  Entonces vale preguntarse, a qué le doy prioridad.

En la actualidad le damos mucho tiempo al trabajo y a los estudios, porque pasamos horas en nuestras instituciones y cuando llegamos a casa seguimos en lo mismo, y en cierta forma está bien.  El deporte ahora tiene su importancia, pero aún nos cuesta porque “no hay tiempo”.  Nos tomamos algunos minutos para el cuidado personal, sobre todo las mujeres (dicen algunos).  Por ahí leí alguna vez (no sé si sea verdad) que Einstein tenía todas sus mudas de ropa iguales, porque decía no tener tiempo para pensar en qué ponerse.  Y el tiempo con la familia no siempre es el mayor, recuerda que no es lo mismo estar en casa que compartir en hogar.  Podemos pasar muchas horas bajo nuestro techo pero desperdiciarlas en la televisión, la computadora, celular, etc.

Por correo circulaba la historia de aquél hombre que pasó horas exageradas en su trabajo para hacer que su empresa crezca y demostrar su compromiso, dejando a un lado a su familia.  El hombre enfermó y finalmente murió volviéndose irremplazable como esposo y padre, pero rápidamente sustituido en su puesto de trabajo.  Es que no siempre nos damos cuenta a quién le estamos entregando nuestra vida.  Tu existencia va más allá, no en un escritorio, oficina o una monótona actividad.

Una vez el Apóstol Pablo escribió que: “tengamos cuidado de nuestro comportamiento, que vivamos como gente que piensa lo que hace y no como tontos”.  Y es que muchas veces nuestra manera de ser con los demás nos lleva a hacer tonterías pues no reparamos en nuestro comportamiento.  Vivimos divagando como necios, pensando en la inmortalidad del cangrejo.

Pero en vez de vivir así, dice la Biblia, “aprovechemos todas las oportunidades para hacer el bien en este tiempo malo y difícil”.  Porque si volteamos la mirada nos damos cuenta en seguida que existen problemas de toda índole a nuestro alrededor, y ahora es nuestra oportunidad de hacer algo bueno por los demás.  Hoy porque mañana podría ser muy tarde.  Hoy busca a tus padres, hijos, hermanos, amigos para reconciliarte.  Hoy dile a tu pareja que la amas.  Hoy cumple tus propósitos.  Hoy sana la tierra, porque los días son muy malos.  Hoy dejemos de actuar como tontos y revisemos nuestro comportamiento para ver a qué le estamos dedicando el tiempo.

Cuando dejamos de distraernos en la vida llegamos a entender lo que Dios quiere que hagamos, dejamos la tontería a un lado y no solo que comprendemos sino que empezamos a vivir y cumplir nuestros propósitos en la tierra.  Y cuando Pablo escribe esta carta a los efesios, les hace entender que pasar borrachos les quitará el control, entonces comprendemos que cualquier vicio que nos ate, nos va a quitar la voluntad sobre nuestros actos y nuevamente actuaremos como necios perdiendo el tiempo.  ¿Voy a dejar que un vicio me descontrole, o permitir que el mismo Dios me llene y me controle?

Si revisamos nuestro actuar y aprovechamos el tiempo en estos días difíciles, nos preocupamos por los demás, vivimos bien los unos con los otros hoy, porque mañana podría ser demasiado tarde.

¿Cuánto tiempo más vas a quedarte pensando en la inmortalidad del cangrejo, permitiendo que tu vida y la de los demás sigan pasando?

S.G. Arcos
-sGv-

jueves, 15 de octubre de 2015

ESPERARÁS SENTADO



¿Has oído la frase: “esperarás sentado”?  Seguramente que sí.  Nos dicen eso generalmente cuando esperamos algo que no se cumplirá, o que es poco probable que se dé.  Cuando alguien no vendrá, no te devolverán algo, o no harán lo ofrecido.  Como cuando esperas que tu pareja que te trata mal vaya a cambiar cuando se casen y tengan hijos.  Groso error.

Pero en fin, esta frase implica en gran medida, desaliento, desesperanza, falta de seguridad, conformismo, etc.  En definitiva, se pierde la perseverancia en lo que quisiéramos y lógicamente en lo que hacemos.  Influye por ejemplo en el típico caso de un chico que quiere vivir de una profesión no tradicional (arte por ejemplo), y la gente alrededor le desmotiva “haciéndole entender” que: “si cree que le van a pagar por eso, tendrá que esperar sentado”.

No obstante esperar es perseverar, y eso involucra tener constancia con la mira puesta en el futuro.  Pero ahora se pretende vivir el momento, lo fugaz e instantáneo.  Por ejemplo, las relaciones emocionales pasan a ser temporales y pasajeras, los bienes, ropa y tecnología se vuelve obsoleta en cuestión de meses.

Pero ATENICIÓN: al ser la Fe, la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.  No debemos quedarnos solamente en “la convicción de lo que no se ve”, deseando experimentar únicamente los milagros.  La fe también es esperar, y eso es la certeza de lo que va a venir.  Así que cuando anhelas algo para tu vida y quieren frustrarte con esa frasecilla de “esperar sentado”.  ¡Aguanta! Que si crees debes perseverar y darle tiempo.

En la actualidad hemos dejado de esperar.  Experimentamos hoy, sentimos hoy, vivimos hoy.  Es que cuando menos le doy tiempo a las cosas, menos expectativas tengo del futuro porque lo que debía vivir mañana ya lo viví hoy, entonces ¿para qué aguardar hasta el siguiente día?

Cuando Moisés se demoró en bajar del monte Sinaí, los israelitas le exigieron a Aarón que haga dioses para que guíen al pueblo.  Es que no supieron esperar, perdieron la paciencia, la certeza y la fe.  No podían ver su futuro, solo deseaban experimentar algo en ese instante, y llegaron al punto de entregar sus tesoros para hacer una imagen.  Por último hasta farrearon con el becerro de oro, y por eso perdieron el rumbo del mañana.

¿Eres una persona que realmente sabe a dónde va, y construyes tu presente sobre la base del futuro que ya elegiste?

Recuerda que cuando Jesús iba a ascender a los cielos les mandó a sus discípulos a que esperaran la promesa del Espíritu Santo.  Y así lo hicieron, esperaron y perseveraron en oración hasta que recibieron poder y levantaron el movimiento de fe más poderoso de todos los tiempos.

Si tienes fe en lo que quieres para tu vida y te quieren detener con esa frase, “espera sentado”.  No te desanimes, mantén la certeza en lo que esperas.  Y recuerda que la manera más fuerte de conectarte con tu futuro mientras disfrutas tu presente, es con perseverancia… con FE.

Gavriell Arcos
-sGv-

martes, 13 de octubre de 2015

¿COMO TE VEN TE TRATAN?




¿Recuerdas el cuento del Patito Feo?, así puede pasar en nuestras vidas, en alguna etapa quizás o en ciertas personas de manera permanente.

Fíjate en esta descripción: “El fiel servidor creció como raíz tierna en tierra seca.  No había en él belleza ni majestad alguna;  su aspecto no era atractivo ni deseable. Todos lo despreciaban y rechazaban.  Fue un hombre que sufrió el dolor y experimentó mucho sufrimiento.  Todos evitábamos mirarlo; lo despreciamos y no lo tuvimos en cuenta”. ¿De quién crees que se está hablando?, pues el profeta Isaías describe a Jesús de Nazaret, ese Jesús fue un “patito feo”.  No era bello como un artista de cine, era rechazado por no estar dentro de los estándares, no era lo que se esperaba.  Lo trataron como lo vieron, pobre, feo y “sin oportunidades”. ¿Así te sientes a veces?
  
Cuando Felipe corre donde su amigo Natanael y le cuenta que habían encontrado al “escogido de Dios” y que venía de Nazaret de Galilea.  Natanael preguntó: — ¿Acaso puede salir algo bueno de Nazaret? — Ven y lo verás —contestó Felipe.

Claro, porque él sabía que Nazaret era un lugar sin historia, donde vivía gente de mala fama, o personas pobres que apenas podían ganarse la vida.  Natanael debió pensar: “ahí solo hay incultos y maleducados, simples obreros sin posibilidades, ¿qué de bueno puede salir de ese lugar?”.

¿Y si dicen eso de ti, de nosotros?, ¿acaso de ese país puede salir algo bueno?, ¿de esa familia, universidad, escuela trabajo, iglesia o ciudad?, ¿puede salir algo bueno de ti?  Porque de esa familia, ciudad o país no puede salir un gran artista, músico, presidente, escritor, atleta, un gran predicador.  Todo lo mejor debe venir de otro lado, ¿por qué?

¡Cuánto puede influir en nuestras vidas que nos traten de esa manera!  Si te vieron y te trataron así y eso ha marcado tu camino, es el momento de dar un giro en tu vida porque recuerda que Dios te hizo y él dice otra cosa de ti.  Porque cuando Jesús vio que Natanael se acercaba, dijo: — Aquí viene un verdadero israelita, un hombre realmente sincero.

Jesús es diferente, él sabía qué pensaban acerca de sí mismo y sin embargo en vez de recriminar a Natanael, Cristo habla bien de su nuevo amigo, porque el Señor tiene palabras de bendición y no dependía de lo que diga la gente para tomar una actitud en la vida.  Él habla bien de ti porque se ha fijado en ti.

Jesús sabía lo que era y cuánto valía a pesar de ser rechazado por su aspecto, su lugar de origen y su posición social.  Estaba seguro de su misión, su poder y de su nombre, por lo tanto no le importó lo que pensaban o decían de él, simplemente vivió con una actitud suficiente que fue lo que plasmó en la tierra y así influyó al mundo.

Ahora, ¿vas a dejar que te siga influenciando lo que la gente diga o piense de ti?  Vive y cree lo que Jesús dice de ti.

S.G. Arcos